En España tenemos una gran variedad de vinos, que dependen, por supuesto de la riqueza y diversidad de uvas que se cultivan. Los climas tan peculiares de cada zona, al igual que los procesos de mezcla y elaboración, han creado una fantástica producción vitícola.
Podríamos elaborar una lista con decenas de variedades de uvas. Muchas de ellas, autóctonas, como Albillo, Txacolina, Moscatel, Palomino o Tinta de Toro. También existen en nuestro cultivos, cepas de origen extranjero que se han adaptado a nuestras latitudes, como Chardonnay, Merlot, Riesling o Syrah.
Debemos destacar entre todas ellas las variedades Airén, Tempranillo, Albariño, Garnacha, Cariñena, Pedro Ximénez y Verdejo.
La enología en España, más que un negocio, es toda una tradición cultural.
No hay comentarios:
Publicar un comentario